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Los anfitriones están en una situación delicada, pues suman tres puntos en la llave A, fruto de una victoria 2-1 contra Nueva Zelanda y una derrota de dos a cero con el fuerte equipo de Japón.
En la última jornada de la etapa de grupos, los asiáticos ya están clasificados, mientras chilenos y neozelandeses dependen de los resultados de la jornada de este viernes.
Para pasar con tranquilidad a la siguiente etapa, Chile necesita vencer en su compromiso y que los kiwis pierdan o igualen con Japón.
Caso contrario, las combinaciones que se abren son numerosas, pues de empatar la «rojita» y vencer Nueva Zelanda, los sudamericanos deberán definir su clasificación como uno de los cuatro mejores terceros del campeonato.
En cambio, si los neozelandeses pierden, Chile sumaría cuatro puntos y quedaría segundo de la llave con el pase en la mano para continuar en la pelea.
Una derrota de los locales los dejaría prácticamente fuera del mundial, a menos que Japón venciera por goleada a sus rivales de la fecha.
Como quiera que sea, tanto el técnico, Nicolás Córdova, como los jugadores, saben que la mejor opción es llevarse el marcador a casa y dormir tranquilos en espera del arranque de los octavos de final.
El otro grupo que finaliza hoy la etapa clasificatoria es el B, donde Ucrania y Paraguay están empatados en la cima con cuatro puntos y una diferencia de un gol para cada uno.
Les siguen Panamá y Corea del Sur, con una unidad a su favor y diferencia negativa de un tanto.
Ganadores y coleros se enfrentan entre sí este viernes y, salvo una sorpresa mayor, todo apunta a que las escuadras de Europa y Sudamérica pasarán a la siguiente ronda.
Santiago de Chile, 3 de octubre 2025
Crónica Digital/PL
