La inversión realizada en esta campaña de exploración, representa menos de la milésima parte del valor del mineral descubierto, el que se puede estimar en varias decenas de miles de millones de dólares. Ello demuestra que ninguna licitación de salares puede efectuarse sin exploración previa.
Sin perjuicio de lo anterior, CENDA considera que el resultado de la licitación efectuada contradice el principio esencial de la Estrategia Nacional del Litio; que establece el control estatal absoluto sobre la explotación del metal. Por esta razón, CENDA estima que dicha licitación no resguarda debidamente el interés nacional.
Las otras licitaciones de “salares chicos” en curso, impulsadas con entusiasmo por el Ministerio de Minería, revisten caracteres antipatrióticos. Están entregando una riqueza nacional estratégica contenida en dichos salares; sin siquiera explorar previamente sus dimensiones, sin reservar participación alguna de empresas del Estado en su explotación, y sin cobro significativo de regalías. Por añadidura, la entrega de estos salares “chicos”se está “agilizando” mediante licitaciones de “procedimiento simplificado”, restringidas a privados que ya tienen concesiones de otros minerales superiores a 80 por ciento, en los mismos salares.
Es decir, en el caso de estos salares “chicos”, se trata de una entrega de una riqueza nacional a conocidos empresarios privados. Uno de ellos, además, es el principal lobbysta en la materia, que ha financiado una campaña en contra del acuerdo que recupera para CODELCO el principal yacimiento del Salar de Atacama, lo cual ha sido denunciado como chantaje por parte de la estatal.
ENAMI y el Ministerio de Minería deben transparentar ante la ciudadanía la trayectoria y resultados de las licitaciones en curso referidas al litio, antes de proceder a la firma de cualquier acuerdo vinculante al respecto.
El Directorio de ENAMI debe declarar desierta la licitación de Salares Altoandinos y proceder a una nueva licitación, que considere su evidente condición estratégica y por tanto, establezca la condición de propiedad estatal mayoritaria.
El Ministerio de Minería debe proceder de inmediato a reclasificar el yacimiento de Salares Altoandinos como estratégico. En lo sucesivo debe generalizar una política de CEOLES acorde con la esencia de la Estrategia Nacional del Litio. Es decir, otorgarlos exclusivamente a CODELCO y ENAMI, con exigencia de control mayoritario en cualquier asociación para explorarlos y explotarlos. Adicionalmente, deben establecer una política de regalías, del mismo orden de magnitud que las del Salar de Atacama.
CENDA emplaza a todos los críticos del acuerdo CODELCO-SQM, a pronunciarse respecto de la licitación de “salares no estratégicos”. A diferencia de este acuerdo, en estas licitaciones, sí resulta bien evidente una entrega de patrimonio público sin debido resguardo del interés nacional. Especialmente deberían opinar al respecto, aquellos críticos del referido acuerdo que han sido denunciados por no transparentar sus conflictos de interés.