La decisión del Gobierno de no incluir la tradicional «glosa de libre disposición» para la administración entrante en el Proyecto de Presupuesto 2026 ha generado una inmediata controversia política. La medida, confirmada por el ministro de Hacienda, Nicolás Grau, durante un cónclave oficialista en Cerro Castillo, fue interpretada por la oposición como un intento de La Moneda por limitar el margen de acción del próximo gobierno, que las encuestas proyectan como opositor.
A pregunta directa del senador Ricardo Lagos Weber (PPD), el ministro Grau respondió negativamente a la inclusión de la conocida como «glosa republicana», argumentando que, en su lugar, se dispondrán facultades de reasignación de recursos. Esta postura, alineada con una propuesta de un comité experto, sorprendió a algunos presentes, incluido Lagos Weber, quien advirtió que podría generar «ruido». El senador socialista Gastón Saavedra defendió la decisión señalando que «no hay recursos disponibles» para la glosa y que confía en que el diálogo posterior podrá resolver las discrepancias.
RECHAZO OPOSITOR
La derecha reaccionó con dureza, calificando la omisión como una ruptura de una práctica institucional y un gesto de desconfianza. La candidata presidencial de Chile Vamos, Evelyn Matthei, tildó la decisión de «inaceptable» e «increíble», lamentando que sea «un daño para la democracia». En la misma línea, José Antonio Kast lamentó que el Presidente Boric «no sea republicano», ya que todos los presidentes salientes han considerado que el gobierno entrante necesita esos recursos para fijar sus prioridades.
La senadora Ximena Rincón (Demócratas) criticó que este tipo de cambios se discutan al cierre de un gobierno y no al inicio, exigiendo que se mantenga la glosa como parte del «fair play«.
CONDICIÓN PARA LEGISLAR
La molestia opositora podría traducirse en una tramitación más dura del Presupuesto. Matthei y el timonel de la UDI, Guillermo Ramírez, advirtieron que su sector no tramitará el proyecto si el Gobierno no entrega de forma transparente toda la información sobre el sobreendeudamiento y las deudas que arrastra el Estado. Ramírez fue enfático: «¿Cómo vamos a discutir sobre cuánto gastar el próximo año si no sabemos cuánto debemos?».
En el cónclave, que se extendió hasta la medianoche, el Presidente Boric y el ministro Grau expusieron los lineamientos centrales del proyecto, que se presentará oficialmente por cadena nacional a las 22:00 horas. Grau anticipó que el crecimiento del gasto público para 2026 oscilará entre un 1.5% y un 2%. El Ejecutivo reafirmó su compromiso con la responsabilidad fiscal y destacó el esfuerzo por aumentar los recursos destinados a derechos sociales y seguridad. Desde el oficialismo, la candidata Jeannette Jara se mostró cautelosa, indicando que prefería esperar a conocer el detalle completo del Presupuesto antes de fijar una postura definitiva.
«DAÑO A LA DEMOCRACIA»
La decisión del Gobierno de omitir la tradicional «glosa de libre disposición» en el Proyecto de Ley de Presupuestos 2026, que se presenta hoy, ha provocado una fuerte ola de críticas y reproches por parte de los candidatos presidenciales de oposición. Esta glosa es históricamente utilizada para que la administración entrante pueda inyectar recursos en sus prioridades durante su primer año de mandato.
La propuesta del Ejecutivo, que se basa en la recomendación de una comisión de expertos de reemplazar la glosa por una facultad presidencial de reasignación de recursos entre partidas (sin aumentar el gasto total), fue rechazada tajantemente por los aspirantes a La Moneda:
Evelyn Matthei calificó la medida como un «daño para la democracia», señalando que «nunca en la historia de los últimos 30 años» un gobierno saliente había negado estos recursos de libre disposición a su sucesor. La candidata destacó que el expresidente Sebastián Piñera sí dejó un monto importante, incluso en medio de problemas fiscales.
José Antonio Kast acusó directamente al Presidente Gabriel Boric de «no ser republicano», al negarse a dejar un presupuesto acorde para que el próximo gobernante pueda abordar sus primeras prioridades, «más allá de la línea política».
El diputado Johannes Kaiser fue el más radical en su respuesta, advirtiendo sobre la posibilidad de una acusación constitucional. Kaiser afirmó que el actual Gobierno «ha hecho trampa con las leyes de Presupuesto» y recordó que las acusaciones constitucionales son legalmente posibles hasta seis meses después del fin de este mandato, sugiriendo que «con otras mayorías parlamentarias podemos hacer valer las responsabilidades políticas» por no actuar correctamente.
La candidata oficialista, Jeannette Jara, se distanció de la polémica, prefiriendo enfocarse en que no se afecte el gasto social ni el gasto en seguridad. La candidata indicó que se les ha adelantado que al menos esos recursos no se verían disminuidos, y llamó a esperar la presentación oficial del ministro de Hacienda para conocer el detalle final de la glosa y el presupuesto. (NP-Gemini-La Tercera)