El Presidente Gabriel Boric se refirió al genocidio cometido por el régimen de Israel en Gaza, donde ya hay más de 64 mil muertos, en un homenaje a las víctimas del golpe de Estado contra el gobierno de la Unidad Popular en 1973.
Señaló: “Vivimos en un mundo donde ciertos consensos comunes y mínimos civilizatorios que fueron alcanzados por la humanidad, después de sendos desastres causados por la propia humanidad, están puestos en duda, están puestos en cuestión. Hoy vemos cómo peligrosamente se ponen en entredicho el reconocimiento y respeto universal de la dignidad de todos los seres humanos por el solo hecho de serlos”.
Añadió: “Hoy somos nuevamente testigos de escenas que pensábamos desterradas. Somos testigos de cómo se falta el respeto, sin ningún tipo de consideración, a los que piensan distinto. Vemos, por ejemplo, en un país hermano, un país vecino, cómo a los adversarios políticos del gobierno se les trata de “cucarachas”. Vemos con preocupación, con estupor, cómo se intentan golpes de Estado, pero afortunadamente la justicia brasileña está actuando hoy día contra los instigadores de eso”.
Y puntualizó: “Vemos y somos testigos de hambrunas intencionadas, de ataques masivos e indiscriminados contra la población civil, de crímenes de guerra, de asesinato a periodistas, a personal médico, a defensores de derechos humanos, a niños y niñas, cuya sangre corre como la sangre de niños y niñas”.
“Parafraseando a José Martí podemos afirmar que, si Dante hubiera visto Gaza hoy, no habría tenido necesidad de pintar el infierno, lo hubiese copiado”, sentenció.
Indicó: “Por eso nos duele Gaza, por eso no permanecemos indiferentes. Tal como el mundo no miró hacia el lado cuando bombardeaban La Moneda, incluso en un tiempo en que las noticias no viajaban con la inmediatez que hoy lo hacen. Porque cada víctima de cualquier genocidio, cada víctima de cualquier crimen político, es mi hermano, es mi hermana. Cada niño o cada niño que muere en cualquier guerra es un hijo de esa humanidad”.
“Para poder sostener la promesa del Nunca Más, hoy debemos estar alertas y activarnos frente a los discursos que relativizan a conveniencia el valor absoluto e incondicional de la dignidad humana”, afirmó.
Boric declaró que no se puede permanecer indiferentes a lo que sucede en Gaza, así como el mundo no miró hacia el lado cuando bombardearon el Palacio de La Moneda el 11 de septiembre de 1973.
A la ceremonia en el Palacio de La Moneda el asistieron familiares de Allende, miembros del Grupo de Amigos del Presidente (GAP), representantes de organizaciones de derechos humanos y partidos políticos, diplomáticos, parlamentarios, estudiantes y jóvenes, y autoridades participaron en el acto en la sede presidencial. Durante el acto, los reunidos en el Patio de Los Naranjos guardaron un minuto de silencio en homenaje a los caídos.
El acto contó con la participación del grupo Quilapayún, que interpretó algunas de sus piezas más conocidas como “Mi Patria” y “La Muralla”.
Santiago, 12 de septiembre de 2025.
Crónica Digital.